El proceso de decisión
Gabriela Quiroga Cuevas
Grupo:262
Independientemente del grado de responsabilidad, todo ejecutivo ha de saber hoy en día tomar una decisión importante para su empresa de forma racional y metódica. La realidad me sigue demostrando que el impulso y la primera impresión siguen marcando enormemente la forma de actuar en una compañía.
Parte de la formación de un directivo consiste precisamente en el entrenamiento en este proceso continuo, y su capacidad se mide teniendo en cuenta la toma de decisiones válidas, en situaciones de emergencia y bajo la urgencia del tiempo. Para toda organización, es básico disponer de un método científico de decisión que pueda suplir las eventuales limitaciones de datos, de conocimientos o de capacidad de análisis por parte de sus directivos. Normalmente, se distinguen seis fases en el proceso de decisión:
- Identificación del problema (el problema existe).
- Análisis del problema (búsqueda de las causas).
- Búsqueda y estudio de soluciones alternativas.
- Elección de la solución más conveniente.
- Ejecución de la solución elegida.
- Control de los resultados reales tras aplicar la solución.
Un problema surge cuando existe una desviación entre lo que teníamos previsto que sucediera y lo que realmente pasa. A este respecto, he de comentar que muchas empresas confunden las consecuencias con el problema, y a lo que realmente hay que dar solución es a este último. La fase siguiente comprenderá el análisis de las causas del problema, para ello se buscarán los datos necesarios, se estudiarán las interrelaciones y se pasarán de las causas primarias a otras, de mayor nivel, hasta llegar a las últimas que expliquen la desviación: ¿alguna causa externa a la organización es la responsable?, ¿fallo en los recursos?, ¿problema organizativo?, ¿dificultades con la competencia?, ¿cuáles son los factores críticos que han desencadenado el problema?...
El proceso de decisión continúa con la búsqueda de los posibles tramos de acción a los que se puede optar y con la posible solución, así como con la determinación de su costo, duración, ventajas e inconvenientes y, principalmente, sus consecuencias e implicaciones para la organización. Incluso la no actuación constituye una posible alternativa que ha de tenerse en cuenta.
Planteadas las posibles alternativas, se adoptará la que satisfaga unos requisitos mínimos de aceptabilidad, como son la exigencia de menos recursos, el menor coeficiente riesgo/ventajas de la solución, la oportunidad, el menor esfuerzo... La elección de la mejor solución no significa que el problema esté resuelto, sino simplemente que la decisión está lista para la acción. Hay que tener en cuenta que la mayoría de las decisiones son ejecutadas por quienes no las toman; por tanto, es importante saberlas comunicar a los colaboradores que son los que van a ejecutarlas; esto supone traducirlas en reglas e instrucciones precisas y concretas, asegurarse de que han sido asimiladas y poner a punto las acciones organizativas derivadas de ello. Por último, nos queda marcar los medios de control exigidos por la solución, que nos indicarán si el problema se resuelve con la decisión tomada. Este control permitirá al directivo comprobar su calidad, identificar rápidamente sus errores, asegurarse de que es ejecutada efectivamente, observar los cambios ocurridos desde que se tomó la decisión inicial y adaptarse a ellos.
Libro: Marketing en el siglo XXI. 2ª Edición
Autor: Rafael Muñiz
27 páginas
http://www.marketing-xxi.com/el-proceso-de-decision-84.htm.
Comentario: Dentro de cualquier organización siempre existen ciertos factores que se van suscitando, ya que una empresa es un ente económico el cual es manejado por hombres en donde por algún u otra razón llegan a existir ciertos conflictos o problemas en donde si no son resueltos de la mejor manera posible podrá interferir con algunas de las metas planteadas por la organización. Para ello el identificar las causas posibles del problema es algo de suma importancia para cualquier persona al frente de un grupo de trabajadores ya que el ver cuál es la raíz del conflicto planteara la mejor manera de poderlos solucionar, esto con el fin de que la problemática no afecte de una manera directa a toda una empresa. El contar con un personal capaz de identificar cualquier anomalía que se pueda presentar dentro de las instalaciones de una organización y las consecuencias que estos pueden acarrear es de gran importancia, ya que, se permitirá tener el control directo sobre las actividades que se realicen.
Para concluir me gustaría mencionar que, los problemas son naturales dentro de una organización pero lo que puede quedar como aprendizaje es que, siempre es posible darle solución, pero para poder llegar a realizarlo uno debe de saber buscar la raíz de donde estos surgieron, con ello se plantearan las bases para poderlos resolver siguiendo cualquier método posible, ya que me gustaría destacar que cada empresa es un mundo diferente y en lo personal no creo que existan unas bases definidas en donde si las seguimos podremos resolver todo lo que se puede llegar a presentar.
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