No es necesario tener talento para hablar en público para hacer una presentación exitosa de tus ideas a potenciales inversionistas. Tampoco es absolutamente indispensable contar con cifras impresionantes para respaldarte.
Según la investigadora Kimberly D. Elsbach, profesora de comportamiento organizacional y decana de la Escuela de Gestión de la Universidad de California, sólo el 1 por ciento de las ideas superan el pitch inicial. ¿A qué se debe?
De acuerdo con la revista Harvard Business Review, las investigaciones al respecto sugieren que los humanos nos formamos un juicio sobre los otros en menos de 150 milisegundos, por lo que en media hora, la persona frente a ti ya se hizo una idea más o menos acertada sobre tu carácter. Por ello la forma en la que te presentas vale, y mucho. Aquí te damos 5 consejos para ayudarte a hacer una presentación exitosa, basándote en el cómo, por encima del qué.
- Usa el humor desde el principio. El humor es una excelente herramienta para captar la atención de tu audiencia, sobre todo si se trata de personas acostumbradas a escuchar a la gente hablar de cifras durante todo el día. Introducir pequeñas bromas al principio, a la mitad y al final de tu discurso hará tu presentación más dinámica.
- Describe el problema, no el producto. Cuando hay poco tiempo para hacer la presentación, describir el producto a profundidad puede comerse todos tus minutos. Habla sobre la manera en que tu producto soluciona un problema, de manera clara y sencilla, y ocúpate de presentar tu producto al final.
- Muestra la solución. Si dices que tienes la solución, debes mostrarla. Deja en claro que tu producto es real y muestra, por lo menos, una fotografía Nadie prestará atención a algo que esté envuelto bajo un velo de misterio, o que requiera de la imaginación.
- Cierra con suavidad. Ir pausando tu discurso conforme se acerca el final crea un efecto narrativo que capta la atención de quienes te escuchan. Juega con las pausas para que tus palabras queden en la memoria de la audiencia.
- Mantente abierto a las preguntas. Aunque puede ser incómodo, debes mantener la calma cuando alguien te interrumpa para hacer preguntas u observaciones, pero recuerda que si lo hacen es porque te están escuchando y valorando si invertir dinero o no en tu negocio.
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