Todos somos piratas¿Cree que comprar productos ilegítimos es un gran negocio para usted?
Alumna: Ruth Nava Torres
Profesor : Samuel Gomez Patiño
Grupo:262
¿Cree que comprar productos ilegítimos es un gran negocio para usted?
Hace algunos años discutí con un violinista profesional quien, además de mostrar su talento en orquestas sinfónicas, solía tocar eventualmente con otros artistas de corte más popular, como Juan Gabriel o Luis Miguel. El sostenía que bajar música gratis por Internet y comprar discos y software piratas era válido, puesto que “las grandes disqueras y otras compañias ya han ganado mucho dinero vendiendonos caro”. Yo oponía el argumento de que, tarde o temprano, la piratería sería un bumerang que acabaría destrozando muchas industrias, incluso las nuestras, refiriéndome a la editorial o musical. Tiempo ha pasado de esa conversación, algo acalorada, y algunas cosas sucedieron: ya hay libros piratas, ya es ilegal bajar cierta música por Internet, Luis Miguel y Juan Gabriel figuran entre los cantantes más copiados ilegalmente, y parte de la piratería es controlada por el narcotráfico; es cierto, también, que algunos discos son más baratos (no los de música “clásica”, por cierto). Para nutrir la discusión digame acá entre nos: ¿ha comprado alguna vez algo pirata? Las probabilidades de que diga que sí son altísimas, porque las cifras de consumo de estos artículos ilegales también lo son (nueve de cada 10 mexicanos compran chafa), al grado de que ya son una real preocupación para las autoridades de México y otros países, entre los cuales no contaremos necesariamente a China; ese gran barco corsario donde se fabrica la enorme masa de artículos apócrifos. En lo macro, en las grandes cifras, se refresca el tamaño del fenómeno. Datos de la Cámara de Comercio de Estados Unidos señalan que en México la piratería alcanza 74,000 millones de dólares; según cálculos de la Organización para la Cooperacion y el Desarrollo Económico, la OCDE, de la que México es miembro, la piratería en 2008 representó al menos unos 250,000 millones de dólares, y el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial dice que el fenómeno es de al menos del doble de tamano: 500,000 millones de dólares. Si les creemos a estas cifras, la compra que hacemos de películas, perfumes, música, ropa, programas de computo, videojuegos, accesorios, calzado y hasta medicinas, sería superior, en el caso de México, a 10 por ciento de su PIB. Si usted tuvo la mala fortuna de pertenecer a alguna de las insdustrias pirateadas, conocerá su sabor amargo. Compramos pirata porque es más barato y porque los mexicanos no condenamos socialmente a quien adquiere lo falso. Creo que esa actitud tan relajada nos llevará a criar un monstruo que ya es, de por sí, mucho mayor que lo que entra al paِِís por petróleo, turismo y dinero de los migrantes. Comentario
Este artículo la verdad me puso a recapacitar en el fenómeno de la piratería, ya que nos afecta en gran medida a todos, como lo muestra el articulo diciendo que en México entra más dinero proveniente de la piratería que por cosas como el petróleo, el turismo y dinero de los migrantes, lo cual se me hizo algo increíble que se gane más dinero por realizar cosas ilegales que por cosas licitas, lo que trae como consecuencia el cierre de muchas empresas que tienen todo en regla a causa del narcotráfico, quien es en su mayoría el que dirige este fenómeno.
La gente compra productos piratas por que estos tienen un precio bajo y no les importa que tengan mala calidad, ya que en el momento estos productos les satisfacen la necesidad, o muchas veces no es que les interese la calidad sino que no tienen el suficiente dinero para comprar buenos productos, y como la mayor parte del país se compone de gente que no tiene tantos recursos, trae como consecuencia que la piratería se sustente y siga desarrollándose.
La piratería hoy en día no tiene límites, tan así que hacen lo que sea por ganar dinero, como por ejemplo vender medicamentos o productos alimenticios adulterados, cosa que no está nada bien porque ya están atentando directamente con la vida de las personas solo por hacerse ricos, pero la verdad no solo es culpa de los vendedores, sino de todas las personas que corren el riesgo de enfermarse hasta de morirse por comprar productos piratas.
Este fenómeno sigue creciendo debido a que como consumidores lo vemos como algo normal, en vez de regañar a la gente o hacerlos ver que está mal porque estamos contribuyendo con las actividades ilegales, por lo que hay que poner en práctica esta cultura de no a la piratería.
Autor: José Ramón Huerta
Revista COSTCO CONTACTO
Febrero 2010- Volumen 18- Numero 139
0 comentarios